“Creen que las acciones humanas están cambiando el medio ambiente. Creen que debemos tomar medidas urgentes para salvar el planeta para las generaciones futuras”, así comienza el artículo de The Daily Beast titulado “Los Truthers de Chemtrail vienen después de Greta Thunberg”. Una parodia de los “teóricos de la conspiración de los chemtrails” donde, no con poca razón, mete a todos los fanáticos del cambio climático (oficialistas y disidentes) en el mismo saco.
Efectivamente, los nuevos radicales de estilo Greta Thunberg que consideran que el clima global puede ser manipulado por la expulsión de unos gases sobre la atmósfera, ya no son lobbies ecologistas, ahora vienen del frente disidente y, como los ecologistas de manual, no atienden a razones: Ni a los cambios cíclicos históricos del clima, ni a las estadísticas de las precipitaciones y temperaturas en España durante las últimas décadas, ni a la verdadera naturaleza de la atmósfera terrestre y el clima:
ÍNDICE
- ¿Estelas en el cielo, son Químicas, son Fumigaciones o es Vapor de agua?. Comprendiendo el funcionamiento de la atmósfera terrestre.
- La siembra de nubes no es algo nuevo ni extraoficial. Se realiza sobre nubes ya cargadas con agua y es imperceptible desde tierra.
- REFUTACIÓN DE ARGUMENTOS “CHEMTRAIL”
- El fraude climático: de la glaciación al calentamiento global. El ser humano no puede cambiar el clima. Autosugestión y agenda 2030.
- El verdadero problema del agua en España (mientras miráis al cielo):
- Vaciado de embalses
- Destrucción de presas
- Negocio de las embotelladoras, agua del grifo y privatización del agua.
- ¿Nos fumigan? Sí, pero desde tierra. Metales pesados en la tierra de cultivo.
1. ¿Estelas en el cielo, son Químicas, son Fumigaciones o es Vapor de agua ?
Fernando Bullón ha dedicado toda la vida al estudio y la divulgación de la Meteorología. Tiene un Canal en Youtube dedicado a compartir información sobre las estelas de condensación, para todas aquellas personas que estén interesadas en ver timelapses de estelas y entender cómo se forman y por qué pueden permanecer tanto tiempo en el cielo -y apenas se diferencian de las demás nubes de tipo cirrus-.
Se trata de nubes generadas artificialmente por el paso de los aviones, cuando se dan las condiciones meteorológicas adecuadas para su formación. Sin embargo no afectan al clima, ni a la salud de la tierra:
En esta intervención, Fernando Bullón en el Canal de Gent Sana, nos explica la verdadera naturaleza de la atmósfera terrestre y el clima, así como la causa lógica de los Contrails (que no Chemtrails)
Compartimos el trabajo divulgativo de Fernando Bullón para que quien lo desee pueda comprender el fenómeno de las estelas de condensación, cómo y porqué se forman los cirros y la bibliografía documentada de los contrails.
Toda la información completa y detallada en el canal de Fernando Bullón: https://www.youtube.com/@estelasdecondensacioncontr9785. | Contacto Fernando Bullón para resolución de dudas: https://t.me/+QCZEJZl2Y9FkY2Vk |
Historia de los contrails documentada (contrailsscience.com)
Los teóricos afirman que las estelas solían disiparse en unos pocos segundos, minutos como máximo. Pero no lo hicieron. Hay una gran cantidad de evidencia (además de muchas personas que recuerdan estelas persistentes). Se remonta a 1918 y continúa hasta el día de hoy:
Combates aéreos durante la Batalla de Gran Bretaña en 1940:
Más documentación, videos de época, fotografías históricas y hemeroteca:
Fotos de estelas a través de la historia : cincuenta fotos de estelas persistentes y extendidas desde 1950 hasta 1995. Tomadas de álbumes de fotos antiguos y libros antiguos. También enlaces a otras colecciones similares.
Fotos de las estelas de condensación de la revista Life : once fotografías que aparecieron en la revista Life entre 1940 y 1998 muestran estelas de condensación que persisten y se propagan.
Estelas de vapor de la Segunda Guerra Mundial : una gran colección de fotografías que muestran estelas persistentes y extendidas de la Segunda Guerra Mundial en la década de 1940.
Estelas anteriores a la Segunda Guerra Mundial : la historia de las estelas que se remontan a 1918, con la primera estela de propagación persistente observada en 1921.
Algunas estelas más de la Segunda Guerra Mundial : una foto de la Segunda Guerra Mundial que encontré en un álbum de fotos antiguo subido a Flickr.
Treinta estelas, hace cuarenta años– Una foto impresionante de un cielo lleno de estelas antes de 1967.
Clouds before Planes – Cloud Studies 1905 – Un libro de 100 años de antigüedad que muestra fotos de nubes que algunos entusiastas de las estelas químicas creen que deben ser hechas por el hombre.
Memphis Belle WWII Bomber Contrails – 1944 – Una película de la década de 1940 que muestra aviones dejando estelas, incluso con huecos en ellas.
Fighter and Bomber Contails, década de 1940 : video y fotos de estelas de guerra en Londres y la campiña inglesa.
Twilight Zone Estelas de condensación: las estelas de condensación aparecen en un episodio de 1959 de The Twilight Zone .
La confusión de contrail no es nada nuevo– Relatos de la década de 1950 de personas confundidas por las estelas, tomándolas como algo más.
2. La siembra de nubes no es algo nuevo ni extraoficial, se realiza dentro de nubes ya cargadas y es imperceptible desde tierra.
Efectivamente, la siembra de nubes se lleva practicando con resultados muy irregulares desde los años 40. Los países que más recurren a la siembra para la producción de lluvias son China, EEUU y México.
Este hecho es oficial y está totalmente documentado y registrado desde hace décadas. Hay innumerables patentes, documentos públicos y vídeos de los operativos que explican perfectamente cómo y dónde se realiza “la siembra”. No hay nada oculto en esta práctica, es más, los medios locales, suelen hacerse eco de estas operaciones de manipulación climática cuando se realizan en sus zonas.
Los orígenes de la siembra de nubes se remontan a la década de 1940, en EEUU. Vincent J. Schaefer y Bernard Volnnegut lograron por primera vez estimular la nucleación del hielo en las nubes mediante nieve carbónica y yoduro de plata. Hoy el método sigue teniendo limitaciones. El yoduro de plata hace que el agua de las nubes pueda condensarse, acelerando la precipitación. Cuando se usa contra el granizo, se pretende que los cristales de hielo precipiten antes de que alcancen un tamaño mayor para evitar que formen granizo.
Tal y como el propio nombre indica, para realizar una siembra de nubes, deben existir nubes. Si no hay nubes, no hay siembra posible. La siembra de nubes no consiste en la creación de nubes artificiales, si no en la introducción de yoduro de plata o similares en el interior de nubes que ya contengan agua líquida por debajo de cero grados Celsius.
La siembra de nubes es totalmente imperceptible desde tierra, de base, porque se realiza en el interior de las nubes. La cantidad de preparado con yoduro de plata documentada es de 100 litros por avión, el líquido se transporta en un termo y se expulsa con quemadores o bengalas. Podemos ver numerosos videos en vivo de Youtube y asistir a una siembra. Estos aviones estarían volando como mínimo a 2000 metros de altura, aunque suele realizarse sobre nubes medias más de 5000 metros de distancia.
Estamos hablando de una cantidad de líquido como la que contendría un termo de agua común que estaría depositándose en el interior de una nube a una distancia media de 10 kilómetros de altura. Es decir, es como si desde el punto cero de Puerta del sol, pudiéramos ver la pulverización de un termo que se está realizando más allá de la Estación de Cercanías de Atocha.
No se puede achacar ciclos de sequía, característicos del clima del sureste de la Península, al vuelo de supuestas avionetas que esparcen yoduro de plata. Si una borrasca no avanza lo suficiente, no llueve. Si no hay inestabilidad atmosférica suficiente, no llueve. Y si hay inestabilidad atmosférica, y se usa yoduro, en todo caso podría llover más de lo que lo haría desde una nube sin sembrar; no hacer que las nubes desaparezcan.
Es absurdo pensar que cualquiera de estas prácticas humanas pueda tener algún tipo de afectación sobre frentes o borrascas de cientos de miles de kilómetros de magnitud. Una afirmación de tal calibre implica no conocer absolutamente nada sobre el funcionamiento de la atmósfera terrestre.
Refutación de argumentos
1. He visto los bidones en aviones, entonces ¿qué contienen?
Numerosas fotografías que supuestamente contendrían productos tóxicos para el rociado de nubes circulan por las redes. Estas fotos han sido directamente extraídas de páginas OFICIALES de compañías aéreas o empresas aeronáuticas. En la foto de ejemplo, que obtenemos directamente en la web de airliners.net, podemos leer:
“Esta es una vista de la cabina principal del A380 en el Dubai Airshow de 2005. El avión estaba equipado principalmente con equipos de prueba y pequeñas secciones del interior adecuado. Los contenedores grises con tapa roja eran contenedores de almacenamiento de agua y estos podían llenarse o vaciarse para actuar como lastre y simular una carga de pasajeros“.
Cuando los fanáticos del fenómeno “chemtrail” comparten las fotografías, jamás enlazan la página original de la que se extrajo la prueba gráfica, contribuyendo a generar más confusión al respecto. Históricamente, la simulación de peso en el vuelo para sus mediciones se ha realizado con bidones de agua, que se vacían y llenan para comprobar las variables de peso.
2. “Antes no se veían estelas”
El tráfico aéreo total en 2022 aumentó un 64,4% con respecto a 2021, según anunció la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA). A nivel mundial, el tráfico de todo el año 2022 fue del 68,5% respecto a los niveles previos a 2019. (Fuente)
Efectivamente, el número de estelas ha aumentado porcentualmente a medida que el tráfico aéreo se ha ido incrementando durante los últimos años. A día de hoy, bajo determinadas condiciones atmosféricas, las estelas llegan a ser tan numerosas que forman una importante maraña de cirros artificiales, algunas permanecen durante horas, otras se dispersan a los pocos minutos. De hecho, para ser más precisos, muchas veces las estelas se entremezclan con otras nubes altas del género cirros, hasta tal punto que es difícil distinguir qué nubes o qué parte de las nubes son de origen artificial o natural, por lo que al final, es muy difícil saber cuántas horas puede permanecer una estela en el cielo.
De nuevo acudimos a la bibliografía sobre este fenómeno atmosférico que, lejos de ser nuevo, recoge testimonios desde sus primeras observaciones entre los años 1919 y 1921:
Mayor persistencia:
En el informe que veremos en el siguiente apartado: “Cuantificación del consenso de expertos contra la existencia de un programa secreto de fumigación atmosférica a gran escala” encontraremos respuestas adecuadas al porqué de la formación de estelas de condensación o cirros artificiales y su persistencia en nuestro cielo.
3. “Eso que veo en el cielo no es normal”
En el informe denominado “Cuantificación del consenso de expertos contra la existencia de un programa secreto de fumigación atmosférica a gran escala” realizado por Christine Shearer 1,2 , Mick West 3 , Ken Caldeira 4 y Steven J Davis 1,2 encontraremos bajo una metodología detallada, amplitud de opiniones y contraposición del disenso. Desde diferentes ámbitos científicos, los expertos son preguntados acerca del fenómeno y si puede ser considerado “normal” atendiendo a sus conocimientos sobre la atmósfera, la física, la química, así como otros temas relacionados con la expulsión de químicos y su afectación en tierra:
Los resultados muestran que 76 de los 77 científicos (98,7%) que participaron en este estudio dijeron que no habían encontrado evidencia de SLAP, y que los datos citados como evidencia podrían explicarse a través de otros factores, incluida la física y la química bien entendidas asociadas con las estelas de los aviones y los aerosoles atmosféricos. Nuestro objetivo no es persuadir a aquellos que ya están convencidos de que existe un programa secreto de fumigación a gran escala, que a menudo rechazan la evidencia contraria como prueba adicional de sus teorías, sino establecer una fuente de ciencia objetiva que pueda informar el discurso público.
Todos los que deseen rebatir con datos probados la explicación lógica de las estelas de condensación, deberían echar antes un ojo a este trabajo de investigación:
4. “Deberías visionar el trabajo recogido en Geoengineering watch“
“El oscurecimiento”, documental del proyecto geoengineeringwatch.org, caballo de Troya del movimiento disidente y principal fuente de referencia de los“chemtraileros”.:
EL OSCURECIMIIENTO – THE DIMMING – acumula 1,5 millones de reproducciones en Youtube.
El documental sigue la estela de la agenda 2030 confirmando a sus adeptos un supuesto cambio climático producido por la acción del hombre ( o la máquina). El documental nos confirma que las estelas supuestamente “químicas” destruyen la capa de ozono y contribuyen al deshielo de los casquetes polares. Ambas afirmaciones son falsas, como veremos más adelante.
geoengineeringwatch.org, es una organización fundada en el año 2012 por Dane Wigington, ex empleado de Bechtel Power Corporation. Wigington recibió el premio “Héroe ambiental” de AwareGuide en 2015 y, según indica la IA en ChatOpenAI, fue incluido en el “Top 10 Real Environmentalists” de RealEnvironmentals.org en 2014, ( aunque no se han encontrado referencias que respalden esta afirmación y la web de referencia nunca estuvo activa). Las organizaciones relacionadas con AwareGuide que parecen comprometidas con el proyecto de Dane Wigington, son a su vez satélites de otros lobbies medioambientalistas como 350.org y fouryearsgo.org, dispuestos a acabar con las emisiones de CO2 en la atmósfera. Organizaciones completamente alineadas con la agenda 2030.
Al comienzo del documental – THE DIMMING – nos muestran imágenes de estelas persistentes DURANTE la segunda guerra mundial, afirmando que eran pruebas de ingeniería climática en fase BETA* al tiempo que afirman que “las operaciones de ingeniería climática fueron desplegadas inmediatamente DESPUÉS de la 2GM (4:50). Más tarde afirmarán que es AHORA cuando se están implementando (Minuto 35:36). Sin embargo disponemos de bibliografía y documentación sobre estelas de condensación muy anterior a 1939.
* El reporte oficial nos cuenta que 1.444 aviones “aliados” despegaron de una pista de aterrizaje en el sudeste de Inglaterra y supuestamente provocaron un descenso en la temperatura de 0,8 grados durante el día a causa de las estelas. (Fuente). Resultados ciertamente pobres para fundamentar una táctica bélica climática.
En el minuto 14:39 del documental, el autor nos asegura que las estelas de condensación bloquean hasta el 80% de la energía solar. 😱. Realmente esto debería llevarnos hasta una era glaciar inmediata: Se registrarían temperaturas bajo cero nunca antes registradas. Tan solo hay que pensar que en uno de los ciclos de letargo del sol, es decir, en uno de los periodos en los que disminuyó su actividad, se presentó la conocida edad de hielo en Europa entre 1645 y 1715. (Cita)
Tras el análisis pormenorizado del documental podemos afirmar que la mayor parte de su contenido es falso o está manipulado a conveniencia del autor.
3. El fraude climático. De la glaciación al calentamiento global.
Clima histórico
La atmósfera del planeta tierra ha tenido grandes variaciones a lo largo de la historia experimentando algunos periodos muy fríos y grandes sequías:
Entre los siglos IX y XIII, Europa experimentaba un clima estable con veranos secos y cálidos y una temperatura media casi 1 ºC más alta que en el siglo XX. Pero en el siglo XIV, el clima europeo empezó a cambiar: las grandes lluvias que anegaron el continente entre 1314 y 1316 fueron el preludio de la Pequeña Edad de Hielo, que se prolongó hasta 1850. | National Geographic: “El cambio climático en la edad media”
Si atendemos a los registros fósiles y geológicos encontraremos cambios climáticos muy extremos en la historia – y en la prehistoria-. Así nos lo cuenta el geólogo Enrique Ortega Gironés, en su excelente artículo de investigación “Geología Versus el Dogma climático“:
Los medios de comunicación, de forma sesgada, suelen presentar ante la opinión pública al fenómeno del calentamiento global como un proceso exclusivamente atribuible a las actividades antrópicas, y sobre el que la Humanidad tiene capacidad para detenerlo e incluso revertirlo. Sin embargo, el registro geológico del planeta indica todo lo contrario, que a lo largo de la historia de la Tierra han existido espontáneamente muchos cambios climáticos similares e incluso mayores que el actual, dirigidos por procesos naturales que siguen activos en la actualidad y que, por lo tanto, modificarlos está fuera de nuestro alcance.
The Great Global Warming Swindle (La gran farsa del calentamiento global)
Documental imprescindible.
Es un polémico documental que sugiere que la opinión científica sobre el cambio climático antropogénico es influenciada por factores financieros y políticos, cuestionando si en realidad existe un consenso sobre el calentamiento global provocado por el hombre. Fue formalmente criticado por Ofcom, la agencia británica reguladora en radiodifusión, que dictaminó que la película no mantuvo la debida imparcialidad y confirmó las quejas de tergiversación hechas por el científico David King, quien aparece en la película. (Wikipedia)
El cuento del CO2 y la destrucción de la capa de ozono, un discurso que ha caído en desuso pero que sigue calando entre la población general. En 4 líneas podemos desmontar la trama completa:
Erupción del volcán Pinatubo
La liberación de 19,000,000 de toneladas de gases tóxicos a la atmósfera, en un corto periodo de tiempo, tuvo consecuencias imperceptibles sobre el clima global:
La erupción del volcán Pinatubo en Fiipinas en 1991 liberó entre 500 toneladas ( entre el 13 de mayo) y 5.000 toneladas por día (hasta el 28 de mayo) de dióxido de azufre a la atmósfera. Se cree que la inyección de aerosoles en la estratosfera fue la más grande desde la erupción de Krakatoa en 1883, con una masa total de aproximadamente 19,000,000 de toneladas cortas inyectadas, el mayor volumen jamás registrado por instrumentos modernos. (Fuente)
De la edad de hielo al calentamiento global.
Podemos leer en el célebre artículo de Times Magazine “Otra edad de hielo” (1974):
“Cuando los meteorólogos miden el promedio de temperaturas alrededor del mundo, encuentran que la atmósfera ha estado haciéndose más fría gradualmente durante las últimas tres décadas. La tendencia no muestra indicios de revertirse. Estos Casandras de la climatología se sienten cada vez más aprensivos, pues las anomalías meteorológicas que están estudiando podrían ser el presagio de una nueva edad del hielo.” The Times. 1974.
La fiesta finmundista glaciar se llevó hasta el Informe de la Academia Nacional de Ciencias de EE. UU./Consejo Nacional de Investigación de 1975. Decenas de artículos similares, todos firmados por reputados expertos del clima y algunos con predicciones aún más nefastas de una “pequeña edad de hielo” por venir, aparecieron durante la década de 1970 en publicaciones tan importantes como Time, Science Digest , The Los Angeles Times, Fortune, The Chicago Tribune , New York Magazine , The New York Times, The Christian Science Monitor, Popular Science y National Geographic:
El fraude del cambio climático es tan flagrante que en pocos años pasamos de presagiar una “inminente era glaciar” a vivir un “calentamiento global sin precedentes” ocasionado por la acción del hombre.
A partir de los años 80 el clima global volvería a ser cálido y seco y los reputados expertos pasarían, de la noche a la mañana, a un modelo diametralmente opuesto bajo el discurso del calentamiento global que cobraría fuerza progresivamente a medida que aumentaban de forma natural las temperaturas.
Para no tener que volver cambiarse el nombre, actualmente el sistema de control social mediante el clima ha pasado a denominarse neutralmente “cambio climático“, quizás porque, tal y como diría José-Ramón Ferrandis, “Llamar ‘Calentamiento Global’ cuando algo no se calienta es demasiado”:
Año 2019: lluvias torrenciales y llenado de embalses.
Año 2019, cuando los pantanos se llenaron demasiado y por eso había que vaciarlos durante el 2022. Leemos la letra pequeña “El peor aliado del clima es el exceso de población”.
Año 2020: La crisis climática es irreversible
LA AGENDA 2030 quiere llevar el fraude del cambio climático antropogénico hasta sus últimas consecuencias. Como una rana que hierve en el agua, poco a poco, nos veremos despojados de nuestros bienes de primera necesidad. Los cortes de suministros básicos (agua y electricidad) constituirán la nueva política del terror en los países desarrollados.
Podríamos seguir tirando de hemeroteca y pasar un buen rato, ya que a 2023 – atendiendo al criterio científico y periodístico de los profesionales a lo largo de las décadas– ya deberíamos estar asfixiados por la completa destrucción de la capa de ozono, el hielo del ártico estaría bajo mínimos y el nivel de nuestros mares habría inundado las principales urbes costeras.
Nada de esto ha sucedido. Ni sucederá.
A continuación os mostramos gráficas tan oficiales como reales sobre la auténtica variación del clima en España atendiendo a la temperatura, las precipitaciones y los recursos hídricos disponibles :
Serie de temperaturas medias anuales en España desde 1965. El año 2017 fue el más cálido y el segundo más seco en España desde 1965:
Evolución anual de la temperatura media en España de 2008 a 2021(en grados centígrados)
Dias con temperatura máxima en Valencia mayor que 31 grados (1869 – 2023).
Las gráficas del AEMET nos muestran la realidad del agua. Los años 2005 y 2017 fueron bastante secos, pero el año 2019 compensó las carencias de años anteriores.
Últimos años secos: 2005 y 2017. En 2019 cayó la mundial.
Precipitaciones en España, último siglo. En cuanto a las precipitaciones obtenemos unos niveles bajos en la década pasada equivalente a los de principios de siglo (1900 = 2010).
Vamos bien de precipitaciones, la media exponencial es ligeramente ascendente.
Las gráficas de reservas hídricas de España se mantienen. Los niveles más bajos se obtuvieron entre los años 1991 y 1995. Durante el año 2022 se vaciaron los embalses de España y comenzó la campaña de destrucción de presas que continúa a día de hoy.
https://www.epdata.es/datos/embalses-boletin-hidrografico/54
4. El verdadero problema del agua en España
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El vaciado de embalses de España: La destrucción del agua.
Leemos en este artículo de Xataka al respecto del vaciado de embalses en España llevado a cabo por las compañías eléctricas de España (gestoras principales de las presas del país) durante el verano del año 2021, que redujeron el nivel de nuestras reservas de agua en más de un 30%:
Ahora que la falta de lluvias está provocando que los pantanos estén en mínimos se ha vuelto a recordar la decisión de las eléctricas de vaciar los embalses para aprovechar los altos precios de la luz. Fue el verano pasado y el Gobierno llegó a investigar a empresas como Iberdrola por lo que se consideró como una acción “escandalosa”.
Las reservas de agua ya están por debajo de la mitad. Según los datos de Embalses.net, el nivel en España se ha situado en el 44,6%, cuando la media de los últimos 10 años por estas fechas ha sido del 60,8%. El gran cambio se produjo con el vaciado, no ahora. Si nos fijamos en la evolución del nivel del agua en los pantanos vemos que realmente la dinámica ha sido equivalente a la de años anteriores. Sin embargo, el nivel del que partíamos a principios de año era mucho más bajo. El cambio de tendencia lo encontramos el año pasado con el vaciado. Los pantanos estaban tan llenos como años anteriores, pero en unas pocas semanas su nivel descendió enormemente para situarse unos 6.000 hm3 por debajo de la media.
Iberdrola, Endesa y Naturgy utilizaron sus centrales hidroeléctricas para frenar posibles pérdidas en el estreno de la llamada excepción ibérica o tope del gas. Además, de forma indiscriminada. Para hacerse una idea, solo en las cinco más utilizadas –Belesar (Naturgy), Mequinenza (Endesa), Alcántara (Iberdrola), Azutan (Iberdrola) y Canelles (Endesa)– se vertieron cerca de 57 hectómetros cúbicos, una cantidad que supone unas 24.000 piscinas olímpicas. Con ello, lograron casar casi la mayoría de los precios horarios del día a través de la generación hidroeléctrica, mientras lograban aumentar la retribución a sus ciclos combinados.
La firma que preside Ignacio Sánchez Galán fue la que más recurrió a este tipo de generación. En concreto, la compañía dio la orden para que su central instalada en el municipio extremeño de Alcántara, que recibe el nombre de José María de Oriol y es la segunda más grande España, liderase el volumen de agua tirado para generar electricidad, con cerca de 20,13 Hm3. Una cantidad que supone casi el 50% de la cantidad de agua tirada en los cinco pantanos con más movimiento de España. Una decisión que sigue dejando al embalse en una situación crítica, con un 48% de agua embalsada frente al 67% de hace un año, con todo el verano por delante.
Pero Iberdrola también recurrió a vaciar otros embalses que están a su cargo como el de Azutan y el de la Almendra. El primero se utilizó con más vigor a lo largo del día anterior con una reducción del agua embalsada de casi ocho Hm3 con lo que puedo obtener una producción energética importante. Aunque sería con la segunda, que tiene instalada la tercera mayor central hidroeléctrica del país, de la que más recurrente se ha servido. En concreto, el embalse ya había disminuido en cerca de 10 Hm3 a medio día de este pasado miércoles 15 de junio. La situación en la Almendra es incluso peor que en Alcántara, ya que apenas mantiene un 36% de su capacidad frente al 79% de hace un año.
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La demolición de presas en España.
Según el informe de Dam Removal Progress, España destruyó, sólo el año 2021, un total de 108 barreras fluviales (entre presas, azudes y rampas) casi la mitad del total de las 239 que se desmantelaron en toda Europa.
Eduardo Rojo, responsable de mantenimiento de presas de Iberdrola no se corta: “La destrucción de presas se realiza por motivos ambientales y económicos, al considerar que estas presas dejan de resultar viables o rentables“. Cita
Estas destrucciones, curiosamente, forman parte de la Estrategia de la Biodiversidad 2030 de la UE, un proyecto con el fin de “devolver el caudal natural a 25.000 Kms de ríos”. Apoyados fuertemente por lobbies ecologistas como Ecologistas en Acción, World Wildlife Fund (WWF) o AEMS Ríos con Vida y otros grupos de presión, el gobierno elimina las subvenciones estatales a las concesionarias y así las presas son declaradas inviables y finalmente son derruidas. Cita
Caso paradigmático es el de la presa de Los Toranes (Teruel) en el río Mijares, que generó gran controversia entre la población local que no comprendía: “En el municipio de Olba, los afectados defienden la rentabilidad y la sostenibilidad de la instalación, además de su importancia en cuanto a regadíos, incendios e incluso turismo” (…) ” Igual que en el caso de Iberdrola con la presa en el Mijares, las concesiones de 30 de estas instalaciones caducarán en los próximos años. Una vez ocurra, el Estado deberá decidir nuevamente entre si mantiene su gestión, una posible licitación pública o su derribo, donde entrará de nuevo la incoherente y contradictoria oposición de estos grupos ecologistas” Cita
Estado del los embalses actualmente en España:
El verdadero estado de los embalses puede monitorizarse desde la web embalses.net donde encontraremos datos actualizados de la disposición de agua en España:
Destrucción de presas en España:
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El negocio del agua de los manantiales. La privatización del agua en España.
Leemos en el artículo “Poder, irregularidades y opacidad sin fronteras en el negocio del agua en España” que la mayoría de las concesiones – de recursos hídricos- en el Estado recaen en manos privadas que contribuyen a consolidar el poder de mercantiles marcadas por la corrupción como Agbar, Aqualia y Acciona.
Las compañías que copan la mayoría de concesiones en el Estado son Aqualia —filial de la constructora y empresa de servicios históricamente relacionada con las hermanas Koplowitz y propiedad del multimillonario mexicano Carlos Slim desde 2016—, Acciona y Agbar (Sociedad General de Aguas de Barcelona) que desde el 2010 es una de las filiales españolas de la compañía Suez, participada a la vez en un 4,1% por Criteria, el holding de inversiones de La Caixa.
Más allá de los líos que acarrea la gestión del agua y de los rifirrafes entre actores privados para controlar el sector, hay organismos que están empezando a poner el foco en la calidad de la red que distribuye el agua de boca por todo el Estado. El Tribunal de Cuentas hizo público un informe (…) en el que pedía más coordinación entre el Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas a la hora de informar sobre cuestiones relativas a los controles sanitarios del agua.
El entramado descomunal que se esconde detrás de la fachada visible del sector hídrico en España está, en gran parte, oculto a la ciudadanía.
Para hacernos una idea del estado de privatización de los recursos hídricos en nuestro país, basta con mirar el artículo “ríos, afluentes, acuíferos y plantas embotelladoras de Cataluña” y observar la situación del agua, solo en Cataluña:
En el artículo Mapa de ríos, afluentes, acuíferos y plantas embotelladoras de Cataluña tenéis el listado completo de las multinacionales que manejan el agua de Cataluña.
5. ¿Nos fumigan? Sí, pero desde tierra.
Los que miran al cielo señalando las estelas al grito de “¡Nos fumigan!” mientras observan estelas persistentes en forma de cirros, deberían bajar la cabeza y mirar al plato. La comida que introducimos directamente en nuestro organismo es tratada con productos plaguicidas altamente tóxicos para nuestra salud. Este es un secreto a voces disponible en cualquier hemeroteca. La propia OMS que, como buen reloj averiado, da la hora correcta dos veces al día, nos lo cuenta:
Los plaguicidas son potencialmente tóxicos para los seres humanos y pueden tener efectos agudos y crónicos en la salud de las personas, dependiendo de la cantidad y la forma de exposición. Algunos de los plaguicidas más antiguos y menos costosos pueden permanecer durante años en el suelo y el agua. Muchos de estos productos químicos han sido prohibidos para uso agrícola en los países desarrollados, pero todavía se utilizan en muchos países en desarrollo.
Hablar sobre los plaguicidas nos llevaría a otros muchos artículos de gran extensión. Temas polémicos como el supuesto “envenenamiento con aceite de colza” y las prácticas genocidas de multinacionales como Monsanto, deberían ser tratados con máximo rigor.
La fumigación generalmente se realiza desde tierra, aunque en ocasiones se emplean avionetas que realizan fumigaciones a muy baja altura, planeando sobre las vastas extensiones de terreno agrícola. Estas avionetas destinadas únicamente a la fumigación en ocasiones disponen de un botón bajo el que podemos leer la etiqueta “chemtrail”. Cuando se presiona, la avioneta libera el pesticida que cae -sin formar nubes ni cirros- en forma de microgotas sobre el campo de cultivo.
En cualquier caso, se trata del mismo pesticida con el que fumigaría el agricultor con un aspersor de mano:
El uso intensivo de substancias agroquímicas ha incrementado notablemente la contaminación por metales de las tierras de cultivo. Este es un hecho contrastado, así como la afectación de la calidad de la tierra por contaminación de otras actividades industriales o mineras. Por tanto, encontrar en las tierras de cultivo metales pesados en límites superiores a las concentraciones máximas permitidas es un hecho plausible, pero la explicación al hecho no viene de los cielos:
El uso agrícola de plaguicidas es un subconjunto del espectro más amplio de productos químicos industriales utilizados en la sociedad moderna. Según la base de datos de la American Chemical Society, en 1993 se habían identificado más de 13 millones de productos químicos, a los que se sumaban cada año unos 500 000 nuevos compuestos. Por ejemplo, en los Grandes Lagos de América del Norte, la International Joint Commission ha estimado que hay más de 200 productos químicos que pueden provocar problemas en el agua y en los sedimentos del ecosistema de los Grandes Lagos. Como en la carga ambiental de productos químicos tóxicos figuran compuestos tanto agrícolas como no agrícolas, es difícil separar los efectos ecológicos y sanitarios de los plaguicidas y los debidos a compuestos industriales que de forma intencionada o accidental se liberan en el medio ambiente. No obstante, hay pruebas abrumadoras de que el uso agrícola de los plaguicidas tiene importantes efectos en la calidad del agua y provoca serias consecuencias ambientales. (Fuente)
Recordemos de nuevo, que el uso de plaguicidas tóxicos es una práctica absolutamente normalizada para el control de plagas y que estas acciones son realizadas por los propios agricultores desde tierra. Por tanto, esgrimir el argumento de los metales pesados en tierras de cultivo para justificar la presencia de chemtrails es, de nuevo, no conocer absolutamente nada sobre las prácticas agroalimentarias habituales.
Podríamos profundizar en la toxicidad alimentaria hablando de las hormonas y vacunas que inyectan a los animales de consumo humano. De los alimentos pasaríamos a los cosméticos, que incluirían desde ungüentos y barras de labios hasta la pasta dental que utilizan nuestros hijos.
La toxicidad es de uso cotidiano.
Visto esto, resulta difícil comprender la razón por la que las élites estarían destinando infraestructuras demenciales para fumigarnos a 5000 metros de altura, un lugar de la atmósfera donde cualquier líquido se descompone, las temperaturas rondan los -60 grados centígrados y la humedad ambiental alcanza cotas inimaginables reteniendo las partículas y transportándolas, a través de corrientes a cientos de miles de kilómetros de distancia, sin ningún tipo de control…
Quizás, algún buen lector, sea capaz de explicármelo.
Isabel Blasco
correo.oh@gmail.com