Por Ana García De Paredes Dupuy
En este artículo hablamos sobre las Agencias de Inteligencia y Seguridad más importantes y de mayor recorrido de los Estados Unidos: desde la Agencia Central de Inteligencia, pasando por La Agencia Nacional de Inteligencia Geoespacial hasta la Oficina de Inteligencia Y Contrainteligencia.
La Inteligencia es un aspecto clave en la política de seguridad de los Estados. Estados Unidos cuenta con varias agencias de inteligencia de gran importancia, encargadas de recopilar y analizar información crítica para la seguridad nacional. Estas operan bajo la supervisión de la rama ejecutiva del gobierno de los Estados Unidos y el Congreso.
Estados Unidos se resistió a la creación de estructuras de Inteligencia permanentes hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, hoy en día dispone de una de las Comunidades de Inteligencia con mayor presupuesto y capacidad de recolección del mundo.
Tras la guerra, la superioridad tecnológica de Estados Unidos con respecto a sus aliados favoreció al país y le situó en una posición privilegiada para intervenir e influenciar en escenarios de interés. Un ejemplo de ello fue el plan de cooperación contra el narcotráfico durante los años 90 en Colombia.
En términos generales, la Inteligencia aporta la información vital —derivada de fuentes clasificadas y no clasificadas— a la hora de tomar decisiones, en este caso a nivel nacional. En este sentido, la Comunidad de Inteligencia estadounidense, en su conjunto, tiene la labor de proveer información precisa, certera, objetiva y a tiempo, con objetivo de ayudar al presidente de Estados Unidos a defender el territorio nacional y proteger los intereses nacionales en el extranjero.
En este caso, la Comunidad de Inteligencia estadounidense ha servido a todos los presidentes de Estados Unidos desde su creación en 1949, tras la aprobación de la Ley de Seguridad Nacional de 1947. Desde entonces, esta Comunidad ha evolucionado hasta convertirse en un ecosistema propio formado, actualmente, por 17 agencias. En este artículo repasamos las principales agencias de Inteligencia de Estados Unidos.
La Agencia Central de Inteligencia (CIA)
La Agencia Central de Inteligencia, también conocida por sus siglas en inglés CIA, es la agencia de Inteligencia más conocida de los Estados Unidos. Es responsable de proporcionar Inteligencia de seguridad nacional al presidente y a los principales responsables políticos. La misión de la agencia es recopilar, analizar y difundir información de Inteligencia sobre gobiernos, organizaciones e individuos extranjeros.
La Oficina de Servicios Estratégicos —OSS—, precursora de esta Agencia, fue creada durante la Segunda Guerra Mundial, siendo la primera organización de Inteligencia global de Estados Unidos. Cuando terminó la guerra, el éxito de la OSS demostró que la Inteligencia estratégica jugaba un papel importante tanto en tiempos de guerra como de paz. Unos años más tarde, el presidente Truman firmaría la Ley de Seguridad Nacional de 1947, que estableció la actual la CIA.
Su misión en un principio era frenar la expansión del comunismo durante la Guerra Fría, pero el cambio de contexto internacional hizo evolucionar sus objetivos. Actualmente, la Agencia recopila y analiza información a nivel internacional para asistir al Gobierno en las decisiones de política exterior.
Algunos de los temas de actuación de a CIA son la no proliferación nuclear, el terrorismo, el crimen internacional organizado o el tráfico de narcóticos. Aunque la CIA opera tanto dentro como fuera de Estados Unidos, no puede recopilar información acerca de ciudadanos ni empresas estadounidenses, independientemente del país donde se encuentren.
La Oficina Federal de Investigaciones (FBI)
La Oficina Federal de Investigaciones, FBI por sus siglas en inglés, es la agencia de Inteligencia nacional de los Estados Unidos. Es responsable de investigar ciertos delitos y proteger al país del terrorismo, ataques cibernéticos y otras amenazas. El FBI también trabaja en estrecha colaboración con otras agencias de inteligencia para recopilar y analizar información de Inteligencia.
El FBI fue creado en 1908 como un grupo especial dentro del Departamento de Justicia. Esta agencia se centra tanto en las amenazas para la seguridad nacional como el terrorismo, los ciberataques o el espionaje recopilando y analizando información, además de velar por el cumplimiento de la ley a nivel federal.
El FBI recopila información que sirve tanto para resolución de los crímenes que investiga como para colaborar con otras agencias de seguridad del país. Actualmente, cuenta con alrededor de 35.000 agentes y analistas de distintas especialidades, tanto dentro como fuera del territorio estadounidense. Sin embargo, cabe destacar que el FBI no forma parte de la Policía Nacional, sino que se trata de una agencia independiente, aunque en ocasiones cooperen en sus investigaciones.
A diferencia de la CIA, que recopila información sobre países y ciudadanos extranjeros que concierne a la seguridad nacional, el FBI se dedica a los delitos cometidos en territorio estadounidense y, a diferencia de esta última, sí puede investigar a ciudadanos, empresas y residentes en Estados Unidos.
La Agencia de Seguridad Nacional (NSA)
La Agencia de Seguridad Nacional, o NSA por sus siglas en inglés, es responsable de recopilar y analizar la Inteligencia electrónica, incluida la Inteligencia de señales y la seguridad de las comunicaciones. La misión de la agencia es proteger la infraestructura crítica de la nación y las redes de comunicaciones del gobierno de los Estados Unidos.
Los orígenes de la NSA se remontan a los primeros años de la Guerra Fría. Concretamente en 1952, cuando el presidente Harry S. Truman creó una organización de Inteligencia criptológica que, integrada en el recién constituido Departamento de Defensa, sustituyera a la efímera Agencia de Seguridad de las Fuerzas Armadas (1949-1952) en materia de monitorización, procesamiento y análisis de comunicaciones telefónicas y electrónicas de terceros países y protección de las redes propias y aliadas.
Según el Real Instituto El Cano, durante la Guerra Fría, esta agencia no solamente llegó a generar casi 80.000 puestos de trabajo y controlar casi todas las comunicaciones electrónicas procedentes del bloque Oriental, sino que creó el controvertido programa ECHELON de vigilancia tecnológica, capaz de monitorizar las comunicaciones telefónicas, de fax y de tráfico de datos de todo el planeta.
Las labores de la NSA están centradas en la Inteligencia de señales, realizando labores de criptología, así como trabajos relacionados con productos y servicios de ciberseguridad, y con las operaciones de redes informáticas que tengan importancia para el país. Por razones de privacidad, se desconoce un número concreto de empleados de la agencia, así como sus sedes y el presupuesto con el que trabajan.
Sin embargo, durante la última década, ciertas investigaciones de la prensa han permitido entrever lo que para algunos es “la punta del iceberg”. Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, la NSA, dependiente del Pentágono y con alrededor de 37.000 empleados civiles y militares, consiguió poderes más amplios para controlar las comunicaciones, dentro y fuera de Estados Unidos y filtrar montañas de datos que permitan desmontar un complot terrorista.
En 2002, Tom Carver, corresponsal para la BBC en Washington, apuntó que cuando Osama Bin Laden se desplazó a Afganistán, la NSA escuchaba cada llamada que hacía en su teléfono satelital, lo que en dos años llevó a registrar más de 2.000 minutos de conversaciones. Finalmente, gracias a ello, Estados Unidos consiguió localizar al terrorista y darle muerte en mayo de 2011 en Pakistán.
La Agencia de Inteligencia de Defensa
La Agencia de Inteligencia de Defensa, o DIA, es la principal organización de Inteligencia del Departamento de Defensa de los Estados Unidos. Su misión es proporcionar Inteligencia a las fuerzas armadas y al Pentágono para apoyar la planificación y las operaciones militares.
La DIA proporciona Inteligencia sobre ejércitos extranjeros y sus entornos operativos para que Estados Unidos y sus aliados puedan prevenir y ganar guerras de manera decisiva. La Agencia está al servicio de toda la población civil estadounidense: desde el presidente hasta el soldado en combate, a través de una combinación de análisis experto, recopilación de Inteligencia y ciencia y tecnología de vanguardia.
La Agencia Nacional de Inteligencia Geoespacial
La Agencia Nacional de Inteligencia Geoespacial, conocida por sus siglas en inglés NGA es la responsable de proporcionar Inteligencia geoespacial —GEOINT— para apoyar los objetivos de seguridad nacional. La agencia recopila y analiza información sobre las características físicas y humanas de la Tierra para brindar una mejor comprensión del mundo y sus amenazas.
Además, la NGA ofrece Inteligencia geoespacial de clase mundial que brinda una ventaja decisiva a los encargados de formular políticas, los miembros del servicio militar, los profesionales de Inteligencia y los socorristas.
Cualquiera que navegue en un barco o vuele en un avión provisto por los Estados Unidos, que tome decisiones en política nacional, combata en guerras, localice objetivos, responda a desastres naturales o incluso navegue con un teléfono móvil, depende de la NGA.
Además, es una combinación única de agencia de Inteligencia y agencia de apoyo de combate. Es el líder mundial en GEOINT oportuno, relevante, preciso y procesable. La Agencia permite a la comunidad de Inteligencia de Estados Unidos y al Departamento de Defensa cumplir con las prioridades de seguridad nacional del presidente para proteger a la nación. También anticipa las necesidades futuras de sus socios y avanza en la disciplina GEOINT para satisfacerlas.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS)
El Departamento de Seguridad Nacional o DHS es responsable de proteger a los Estados Unidos de las amenazas a su seguridad, incluido el terrorismo, los ataques cibernéticos y los desastres naturales. La División de Inteligencia y análisis de la agencia brinda apoyo de Inteligencia al DHS y otras agencias federales, estatales y locales.
Tras los ataques del 11 de septiembre, el presidente George W. Bush estableció el DHS al firmar la Ley de Seguridad Nacional de 2002. El 1 de marzo de 2003, 22 agencias se unificaron bajo un solo departamento con una misión común: salvaguardar al pueblo estadounidense. Los objetivos de la DHS abarcan desde la prevención del terrorismo y la aplicación de la ley, hasta la seguridad marítima y fronteriza, los servicios de inmigración, la seguridad del transporte, la respuesta y recuperación de emergencia, los servicios de protección, la seguridad cibernética y más.
En los últimos 20 años, el panorama de las amenazas ha evolucionado. Mientras la Agencia continúa enfrentando la amenaza del terrorismo internacional, han surgido nuevos retos y desafíos, incluidos el aumento de incidentes de violencia dirigida, los ataques cibernéticos y varios desastres naturales, así como el nivel sin precedentes de migración en nuestro hemisferio.
La plantilla laboral del DHS de 260,000 personas utiliza sus habilidades y experiencia para enfrentar los desafíos del mundo de hoy y prepararse para las amenazas del mañana, respondiendo con nuevos programas y capacidades, colaboración entre componentes y una dedicación inquebrantable a la misión.
Hoy, el DHS abarca más de dos docenas de agencias y oficinas que trabajan en colaboración para proteger al público estadounidense en el aire al asegurar los viajes aéreos; en tierra asegurando la frontera, respondiendo a los desastres naturales, protegiendo la infraestructura crítica y administrando el sistema de inmigración legal de nuestra nación; en el mar protegiendo nuestras costas y vías fluviales; y en el ciberespacio al reforzar la defensa cibernética de Estados Unidos e investigar el delito cibernético.
El Departamento de Energía (DOE) y la Oficina de Inteligencia y Contrainteligencia (OICI)
La Oficina de Inteligencia y Contrainteligencia (OICI) del Departamento de Energía (DOE) es una agencia federal responsable de salvaguardar la seguridad nacional y la infraestructura crítica de los Estados Unidos mediante la prestación de servicios de Inteligencia y contrainteligencia. La OICI se estableció en 1977 y forma parte del programa general de seguridad del Departamento de Energía.
La misión de la OICI es proporcionar Inteligencia oportuna, precisa y procesable a los responsables de la toma de decisiones dentro del Departamento de Energía, así como a otras agencias y departamentos federales, para ayudar a prevenir la proliferación de armas de destrucción masiva, garantizar la seguridad nuclear y proteger contra el espionaje extranjero y otras amenazas.
La OICI emplea una variedad de métodos para recopilar Inteligencia, incluida la Inteligencia humana —HUMINT—, la Inteligencia de señales —SIGINT— y la Inteligencia de fuente abierta —OSINT—.
Además de sus actividades de Inteligencia y contrainteligencia, la OICI también brinda capacitación y apoyo al personal del DOE sobre concienciación sobre seguridad, identificación de amenazas y otros temas relacionados, trabajando en estrecha colaboración con otras agencias y departamentos federales, incluida la Oficina Federal de Investigaciones, el Departamento de Seguridad Nacional y el Departamento de Defensa, para coordinar los esfuerzos de inteligencia y contrainteligencia en todo el gobierno.
Este artículo fue publicado originalmente en https://www.lisanews.org/. Lea el original.