Exceso de mortalidad durante y después de la emergencia de COVID-19 en Japón: un diseño de series de tiempo interrumpidas de dos etapas

Antecedentes: La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto sin precedentes en la mortalidad a nivel mundial. Este estudio tuvo como objetivo estimar el exceso de mortalidad por todas las causas en Japón entre 2020 y 2023, estratificado por edad, sexo y prefectura, para evaluar el impacto evolutivo de la pandemia, especialmente en los últimos años. El período de estudio se extiende más allá del fin de la emergencia sanitaria en Japón.

Métodos: Utilizando datos de estadísticas vitales nacionales de 2015 a 2023, empleamos un análisis de series temporales interrumpidas en dos etapas para estimar el exceso de mortalidad durante la pandemia de COVID-19 (2020-2023) en comparación con el período prepandémico (2015-2019). Los modelos se ajustaron por estacionalidad, tendencias a largo plazo, temperatura y actividad de la influenza. Calculamos el exceso de muertes durante la emergencia de COVID-19 (del 14 de enero de 2020 al 7 de mayo de 2023) y después de ella (del 8 de mayo de 2023 al 31 de diciembre de 2023).

Resultados: Japón experimentó un exceso de mortalidad de 219 516 (IC empírico del 95 % [ICe]: 138 142 a 301 590) durante el período de estudio, lo que corresponde a un exceso de mortalidad del 3,7 % (ICe del 95 %: 2,33 a 5,09). El exceso de mortalidad fue negativo en 2020 (-1,67 %, ICe del 95 %: -2,76 a -0,55), se volvió positivo en 2021 (2,19 %, ICe del 95 %: 0,9 a 3,49) y alcanzó un máximo en 2022 (7,55 %, ICe del 95 %: 5,96 a 9,13) antes de descender en 2023 (5,76 %, ICe del 95 %: 4,29 a 7,24). El grupo de edad <60 mostró sistemáticamente el mayor porcentaje de exceso de mortalidad. Los hombres presentaron un exceso de mortalidad ligeramente superior al de las mujeres. Para 2022, todas las prefecturas presentaron un exceso de mortalidad positivo. El riesgo relativo alcanzó su punto máximo a finales de 2022, con un pico menor en el verano de 2023, coincidiendo con el período posterior a la emergencia. La comparación de este período posterior a la emergencia con años anteriores muestra el mayor porcentaje de exceso de mortalidad en 2022. Las prefecturas rurales, y aquellas con menos casos de influenza, mostraron un exceso de mortalidad reducido durante este último período y el período posterior a la emergencia.

Conclusión: A pesar del éxito inicial en la mitigación del exceso de mortalidad, Japón experimentó un aumento de la mortalidad excesiva a medida que avanzaba la pandemia, con un aumento continuo después de la emergencia. El impacto variable según los grupos de edad y el momento pone de relieve la complejidad de los factores que afectan la mortalidad. Los hallazgos de este estudio subrayan la importancia del monitoreo continuo del exceso de mortalidad como indicador clave para la dinámica de la salud pública.