El Doctor Stefano Scoglio, graduado en Ciencias Biomédicas, con un posgrado en microbiología médica, ha publicado un articulo titulado: EL GRAFENO NO EXISTE. En el mismo analiza el informe realizado por Pablo Campra Madrid y llega a la conclusión de que no existe prueba alguna de la supuesta presencia de oxido grafeno en los viales analizados.
En el mismo, entre otras conclusiones, se indica:
Por lo tanto, buscar indistintamente estructuras grafíticas o grafénicas es ya una admisión implícita de la realidad de los hechos, o más bien del hecho de que lo que se hace pasar por grafeno no es otra cosa que grafito, sin ninguna de las sorprendentes propiedades del grafeno, sino únicamente con el nombre de grafeno…
En efecto, porque si el grafeno es, como oficialmente se define, una capa monoatómica, o como máximo 9-atómica, significa que su espesor es tan infinitesimal que resulta, de hecho, invisible, como veremos. Por lo tanto, siempre y cuando sea de alguna manera visible, en el mejor de los casos puede ser transparente, y seguro que no oscuro. Por lo tanto, un estudio adecuado debería haber considerado únicamente la categoría de objetos translúcidos; sin embargo, es precisamente esa categoría la que, después de haberla introducido, Campra elimina por no responder a la técnica micro-Raman…
… el verdadero problema es, por consiguiente, que los únicos objetos que podrían tener alguna relación con el fantasmal grafeno, los objetos transparentes, son precisamente los eliminados de la escena, y por lo tanto, solo quedan los objetos oscuros y carbónicos que, por su apariencia, no pueden ser otra cosa que grafito.
Utilizar una mera similitud para afirmar una certeza me parece una exageración, como el propio Campra confiesa abiertamente, el cual desciende de la «certeza» a la «alta probabilidad…
El único instrumento que podría ver el grafeno es el TEM, microscopio electrónico de transmisión, del que se dice que tiene una resolución de 0,2 nanómetros, es decir, casi del nivel atómico. Pero incluso suponiendo que fuera adecuado, en la práctica habría que trabajar con un material invisible, y resultaría muy difícil de gestionar. Pero la realidad es aún más cruda, porque el TEM presenta enormes problemas en relación con el supuesto
grafeno.
Puede leer y descargar el artículo completo del Dr. Stefano Scoglio en:
El grafeno no existe. Por Stefano Scoglio. – STOP VACUNAS (wordpress.com)
( traducido al español)
Artículo original en:
IL GRAFENE NON ESISTE – Poliphylia