Abstracto
Una niña japonesa de 14 años murió inesperadamente 2 días después de recibir la tercera dosis de la vacuna COVID-19 de ARNm Pfizer-BioNTech. Los hallazgos de la autopsia mostraron edema congestivo de los pulmones, infiltración linfocítica y de macrófagos de células T en los pulmones, pericardio y miocardio de la aurícula izquierda y el ventrículo izquierdo, hígado, riñones, estómago, duodeno, vejiga y diafragma. Como no había infección previa, alergia o exposición a toxicidad farmacológica, al paciente se le diagnosticó neumonía posvacunación, miopericarditis, hepatitis, nefritis, gastroenteritis, cistitis y miositis. Aunque ningún tipo de inflamación es fatal por sí solo, se informa que la arritmia es la causa más común de muerte en pacientes con miopericarditis auricular. En el presente caso, se asumió que la arritmia de origen auricular fue la causa de la insuficiencia cardíaca y de la muerte. En las muertes súbitas posvacunación, son indispensables una autopsia agresiva, búsqueda sistémica y un examen histológico que implique una sección extensa del corazón, incluida la aurícula.
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