Ucrania pasa a ser uno de los principales países receptores de armamento español según los datos publicados por la Secretaría de Estado de Comercio.
El viernes 27 de febrero la Secretaría de Estado de Comercio hizo público el informe de estadísticas de exportaciones de material de defensa y doble uso del primer semestre de 2022. Según los datos publicados, España autorizó la exportación de armamento por un valor total de 4.192 millones de euros, y realizó exportaciones por un valor total de 1.293,1 millones.
Arabia Saudí sigue siendo el mayor receptor de armamento español, seguido de Francia, Gran Bretaña, Turquía, Alemania, Singapur, Malasia, Omán, Mali e Italia. Por lo que se refiere a las exportaciones autorizadas, la lista también la encabeza Arabia Saudí, seguido de Canadá, Gran Bretaña, Italia, Turquía, Ucrania, Francia, Corea del Sur, Alemania y Serbia.
Armas a Ucrania, en apoyo a la guerra
En el primer semestre del 2022 el gobierno autorizó exportaciones de armas a Ucrania por valor de 209,7 millones de euros y exportó en ese mismo periodo 18,3 millones de euros. El material autorizado y exportado se inscribe en las siguientes categorías de material militar; categoría 1: fusiles, ametralladoras y revólveres; categoría 3: Municiones; categoría 4: Bombas, torpedos, granadas y misiles; categoría 5: ordenadores de bombardeos, equipos de puntería para cañones; y categoría 13: planchas de blindaje y prendas de protección.
Estas exportaciones irán en aumento, no solamente porque el material autorizado es superior a lo exportado, sino por la propia duración de la guerra; en la medida en que ésta se alargue en el tiempo, las exportaciones de material militar aumentarán y todo parece indicar que se ampliarán a otras categorías de material pesado y ofensivo como el recientemente anunciado de los tanques Leopard.
Armas para la guerra en Yemen
Las exportaciones en este semestre para Oriente Medio siguen la misma tónica, sin cambios respecto a años anteriores. El material militar exportado a países de la región representa el 27,7% del total exportado. Los principales receptores han sido Arabia Saudí cuyas exportaciones han ascendido a 302,2 millones de euros; Omán, con 33,3 millones de euros; y Emiratos Árabes Unidos, con 17,3 millones de euros. Arabia Saudí ha recibido 1 corbeta, fabricada por Navantia y valorada en 261,6 millones de euros y municiones de 155 mm valoradas en 26,1 millones de euros (todo ello armamento de combate). Omán ha recibido municiones diversas y vehículos terrenos. Emiratos Árabes Unidos ha recibido eminentemente sistemas de dirección de tiro, sistemas de control remoto y aeronaves y UAV y vehículos terrenos.
Arabia Saudí, que lidera la adquisición de material de defensa en la región, tiene dos frentes abiertos. Por una parte, aspira a ser la potencia regional, le disputa esta posición a Irán. Y por otra parte, lidera la coalición que interviene militarmente en Yemen. Tanto Arabia Saudí como Emiratos han llevado a cabo ataques indiscriminados contra la población civil yemení, considerados crímenes de guerra. Son especialmente alarmantes por razones humanitarias las ventas de munición a Arabia Saudi, que por sus características escapan de cualquier mecanismo de control a posteriori.
Armando Asia
Asia Pacifico ha pasado a ser el foco donde se disputará la hegemonía mundial y por tanto una región que lentamente se está militarizando. Es una región que empieza a tener un peso importante en gasto militar y en adquisiciones de armamento de nueva generación. Las empresas españolas intentan hacerse con una parte de este mercado. En este primer semestre de 2022, el gobierno autorizó exportaciones de material militar por valor de 225,7 millones de euros y se ha exportado material militar por valor de 182,9 millones de euros, un 14,1% del total de las exportaciones.
Los principales destinos han sido: Singapur con 68,8 millones de euros en material principalmente en repuestos de aeronaves; Malasia con 45,3 millones de euros en repuestos de aeronaves y armas de fuego; Pakistán con 19,4 millones de euros principalmente en equipos electrónicos, guerra electrónica y armas de fuego; Filipinas con 17,5 millones de euros principalmente en municiones y dispositivos; y Corea del Sur con 14,1 millones de euros principalmente en aeronaves y equipos electrónicos.
Material antidisturbios a Perú
En este primer semestre de 2022 el gobierno ha autorizado la exportación de material antidisturbios a la policía de Perú por valor de 6,3 millones de euros. Según el gobierno, a lo largo de este semestre no se exportó dicho material, puede que se haya exportado en el segundo semestre. Dada la situación social en el país sería conveniente detener dichas exportaciones.
Considerando lo delicado del material que se exporta y dadas las consecuencias humanitarias de estas exportaciones, es necesaria una mayor transparencia por parte del Gobierno español, más información sobre el material específico que se ha exportado, así como someter a debate en el Congreso de los Diputados, antes de ser autorizada la exportación. Al mismo tiempo, instamos al Gobierno a eliminar las exportaciones de material militar y de doble uso de la ley de Secretos Oficiales; ello facilitaría el control político a la acción del gobierno por partedel Congreso de los Diputados y de las organizaciones de la sociedad civil.
La política por encima de todo
Las exportaciones de armamento a Ucrania demuestran que, en España, el comercio de armamento se está utilizando como un instrumento de intervencionismo militar. No es un fenómeno nuevo, ya se hizo con la autorización de exportaciones a Irak a partir del año 2014.
Además, parece que ni el Tratado sobre el Comercio de Armas, ni la Posición Común 2008/944/PESC de la Unión Europea en materia de exportación de armas han supuesto un obstáculo para poder exportar armas a Ucrania. El órgano administrativo competente para autorizar en España las transferencias de armamento, la JIMDDU, no ha hecho más que respaldar las decisiones previamente adoptadas por el Gobierno. En el caso de las exportaciones a Arabia Saudí y a Emiratos Árabes Unidos también parece claro que la JIMDDU está realizando una interpretación muy poco exigente de la legislación. Todo ello demuestra que, en esta materia, priman los intereses políticos, relegando a un segundo plano las consecuencias que este armamento pueda tener tanto de forma inmediata como en el futuro en cuanto a vulneraciones de derechos humanos.
Podéis descargar el Fact Sheet aquí.
Este artículo fue publicado originalmente en https://rebelion.org//.Lea el original.