La verdad sobre el periodismo: Así se manipula nuestra visión del mundo

Este libro examina el funcionamiento real del periodismo moderno, sus estructuras empresariales, sus dependencias financieras y su influencia directa en la construcción de la opinión pública.

No acusa a individuos ni deslegitima la prensa como institución; analiza mecanismos, dinámicas y conflictos de intereses que pueden distorsionar la percepción del ciudadano.

La verdad sobre el periodismo: Así se manipula nuestra visión del mundo : Kaiser, Alejandro: Amazon.es: Libros

El lector es invitado a contrastar, no a obedecer —a observar, no a consumir pasivamente.
Aquí se cuestiona.
Aquí se compara.
Aquí se piensa.

“Periodismo es publicar lo que alguien no quiere que publiques.
Todo lo demás son relaciones públicas.”
— William Randolph Hearst

“En las dictaduras, se manipulan las elecciones; en las democracias, se manipula a los votantes.”
— George Orwell

La mayoría de los ciudadanos confía en que informarse significa abrir un periódico, encender la televisión o leer titulares en redes sociales. Creemos que contrastamos fuentes cuando, en realidad, acudimos una y otra vez al mismo puñado de conglomerados mediáticos que controlan, directa o indirectamente, gran parte de los periódicos, canales y emisoras del planeta.

El hecho es simple, pero raramente reconocido:

el ecosistema mediático mundial no es diverso, sino centralizado.

Pocos propietarios. Pocos consejos directivos. Pocas manos que deciden qué se publica… y qué jamás llega a los ojos del público.

El ciudadano medio cree que cada redacción investiga por separado. Pero gran parte de lo que consumimos nace en agencias de noticias que abastecen a miles de medios con textos casi idénticos. Por eso encontramos el mismo artículo, las mismas frases y a veces el mismo titular en diarios supuestamente independientes. El periodismo de investigación —ese que destapa, incomoda y desnuda el poder— es cada vez más residual frente a la información empaquetada y distribuida como mercancía estandarizada.

Los periodistas no son villanos. Muchos entraron a la profesión para buscar la verdad… pero el sistema no está diseñado para premiarla. ¿Qué ocurre cuando investigar a un anunciante supone perder financiación? ¿Qué medio muerde la mano que lo alimenta?
La respuesta es obvia. Y silenciosa.

El lector encontrará aquí:

✔ cómo funcionan los oligopolios mediáticos globales
✔ quién decide qué se publica y qué se oculta
✔ por qué las agencias sustituyeron al reportero clásico
✔ cómo opera el “cártel de opinión” a nivel internacional
✔ por qué las RR.PP. están reemplazando al periodismo real
✔ y, sobre todo, cómo recuperar el pensamiento crítico

Este libro no pide fe.
Pide duda razonada.
Pide volver a pensar.

Porque la libertad de prensa no vale nada
si perdemos la libertad de comprender.