Esta mañana la provincia canadiense de Ontario ha declarado el estado de excepción en respuesta a los bloqueos organizados por los camioneros en protesta por la vacunación obligatoria y las restricciones sanitarias.
La capital, Ottawa, también ha tomado medidas represivas similares. Hasta ayer se habían producido 23 detenciones por la ocupación del centro de la capital. La policía ha reconocido que no tiene capacidad para emprender un desalojo de los manifestantes y ha advertido que seguirá realizando detenciones sin madato judicial.
El primer ministro de Ontario, Doug Ford, ha adelantado que se pondrán en marcha de manera urgente nuevas leyes prohíban bloquear e impedir el movimiento de bienes, personas y servicios a lo largo de infraestructuras cruciales.
Miles de camiones mantienen bloqueadas amplias partes de Canadá y se espera que a lo largo del fin de semana se registren concentraciones en otras zonas del centro de Toronto. Además, siguen bloqueados tres pasos fronterizos con Estados Unidos. Otras protestas han provocado cortes de tráfico en las inmediaciones del aeropuerto internacional de Ottawa.
Ford ha explicado que se reforzará la protección de los cruces fronterizos internacionales, carreteras, aeropuertos, puertos, y vías férreas, al igual que los desplazamientos esenciales de los servicios médicos, de transporte público, y las vías de acceso municipales y provinciales.
“Las multas por incumplimiento serán severas, con una pena máxima de 100.000 dólares canadienses (69.000 euros) y hasta un año de prisión”, ha advertido Ford, quien a su vez ha amenazado con retirar las licencias para trabajar en el sector “de cualquier persona que no cumpla con estas órdenes”.
El anuncio de Ford se da en medio de fuertes críticas hacia su gestión, después de que se le haya reprochado no haber hecho lo suficientes en las últimas semanas para contener la protestas, que comenzaron en Ottawa y que cumplen este viernes su tercer fin de semana.
Los manifestantes protestan por las medidas represivas implantadas con el pretexto de la pandemia, sobre todo las relacionadas con la vacunación obligatoria. Ford, cuyo Gobierno todavía no ha alterado de manera significativa ninguna de estas medidas, ha avanzado que “muy pronto casi todas las restricciones” serán levantadas como parte del plan de reapertura, incluido el pasaporte sanitario.
Los camioneros de Estados Unidos también preparan una movilización para el domingo frente al mayor acontecimiento deportivo, la Super Bowl, con el objetivo de boicotearla para protestar contra la vacunación obligatoria.
Lo mismo está ocurriendo en Europa, donde diversas caravanas se han puesto en marcha hacia París. La policía de Bruselas ha advertido que no ha autorizado ninguna manifestación y ha tomado medidas para evitar el bloqueo de la capital europea.
Este artículo fue publicado originariamente por https://mpr21.info/.Lea el original.