¡Hola, fact-checkers! ;

Hace tiempo que deseo hablar sobre la censura informativa y la manipulación de datos ejercida por vuestras agencias de verificación, cuya filiación a la IFCN, deja bastantes dudas acerca de la neutralidad del fact checking internacional.

La censura impuesta por los organismos afiliados a la Poynter, extiende sus tentáculos hasta Google y Youtube, plataforma esta última, que ha ejercido un expolio similar a la destrucción de la biblioteca de Alejandría:

Millones de vídeos han sido eliminados. Los canales de sus autores han sido cerrados (algunos con cientos de miles de suscriptores), el material ha desaparecido sin mayor explicación, ni posibilidad de recuperación. También millones de cuentas de Twitter fueron eliminadas y los perfiles y canales de Facebooks bloqueados. Nuestro último reducto fue Telegram.

El expolio corre por las redes en forma de algoritmos, los contenidos no oficialistas quedan tan por debajo que son imposibles de alcanzar. El ingente trabajo realizado ha servido para muy pocos.

En esta lucha por la excelencia profesional y contra la censura, he podido comprobar como trabajos rigurosos y perfectamente documentados eran eliminados de las redes, primero en cuestión de días, más tarde en cuestión de minutos. Y, no sólo hablamos de los contenidos relacionados con “la pandemia”, también se han dado a la fuga numerosos trabajos de otras muchas temáticas.

Os muestro algunos ejemplos:

Dejen que me pare en la cuestión del revisionismo histórico, ya que el deseo de conocer otras versiones de la historia reciente sólo es derecho a la información, por mucho que la historia la escriban los vencedores, aquellos que conquistaron, incluso a sangre y fuego, el poder. Los hechos documentados en esta saga cuentan con la versión de numerosos autores judíos, entre los que destacaré fervientemente la labor de David Cole, uno de tantos judíos que merece toda mi admiración y respeto.

Como vemos, la exposición pública se enfrenta a un veto con muros de espesor. El muro incluye leyes que podrían encarcelarnos por mostrar una versión diferente de la historia, aunque detrás del trabajo de investigación y documentación no exista la más mínima intención de odio.

 

Metodología de los fact-checkers

Recientemente pudimos ver el artículo de Maldita “Metodología: cómo investigamos a los negacionistas de Telegram“, donde partiendo del “trabajo diario” de Maldita se elabora una base de datos con 39 canales negacionistas de Telegram, entre los cuales nos encontramos. 

Según indica Maldita, el punto de partida de la investigación fueron 24 canales que habían difundido desinformación  (…) Tras una primera extracción se identificaron canales nuevos y de ahí salen para Maldita los 39 canales negacionistas seleccionados.

Disculpen si discrepo con la metodología de Maldita, pero sus criterios y supuesto seguimiento diario obedecen a una total abstracción de la realidad y el resultado, no podía ser otro que, una falacia desinformativa de primer orden:

 

Este pastiche de canales que ustedes obtienen, según el diario La Vanguardia, resulta ser un clan de desinformación tóxico con un millón y medio de suscriptores. Veamos el titular:

 

 

Recordemos la definición de “clan,” según la RAE, para atajar la potencialidad de la infamia:

“CLAN es un grupo, predominantemente familiar, unido por fuertes vínculos y con tendencia exclusivista” (…) Por tanto, definir como “clan” a 39 canales cuyas temáticas y enfoques están a años luz de parecerse, y sus filiaciones son nulas, solo puede obedecer a una causa, la de vuestros permanentes conflictos de intereses.

Estos conflictos, parece que van  más allá de defender los negocios farmacéuticos de vuestros creadores y benefactores, también se ocupan de la detracción de vuestros “enemigos” en la causa. Veamos un ejemplo claro, para que todos entiendan de qué les estoy hablando:

 

Así es, el mismo Alvise Pérez que figura entre los primeros integrantes de la lista del negacionismo, acostumbra a lanzar sus afirmaciones acompañadas de documentos verificados muchos de los cuales revelan la corrupción intrínseca de los principales medios de comunicación, así como sus filiaciones con altos cargos de la política española.

Es público que los creadores de MALDITA, Clara Jiménez Cruz y Julio Montes han desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en laSexta. Clara, formó parte del equipo de El Objetivo de Ana Pastor;  y Julio trabajó durante más de una década en laSexta, siendo uno de los creadores de laSexta Columna.

Por otra parte, la fundadora de Newtral es la propia Ana Pastor.   Así que podemos observar como la verificación en España está en manos del mismo lobby mediático vinculado a la Sexta y a la familia Pastor-Ferreras.

No extraña, visto así, encontrar a Alvise Pérez en esta infame lista del negacionismo, pues al fin y al cabo un día dijo algo como que en verano hace calor o en hace invierno frío (…) como siempre ha sucedido, o una cosa parecida.. Así que los fact checkers fueron raudos a desmentir tan falsisímas y negacionistas afirmaciones.

 

Si, entre las miles y miles de publicaciones de Alvise sobre las mafias políticas y mediáticas en España, estos verificadores no encontraron ninguna fake  para desmontar, entonces, jodidos estamos.

La pregunta que surge inevitablemente es ¿Quién verifica a los verificadores?. ¿Quién puede hablar de vuestros conflictos de intereses? ¿Quién puede denunciar vuestra presunta corrupción?.

 

Y ¿Quién os financia esta vez?

Antes de seguir, dejen que les diga, quién les financia esta vez. Esta nueva operación de hostigamiento está patrocinada, nada más, ni nada menos, que por la mismísima OTAN, tal y como podemos comprobar en este artículo de La Vanguardia y que replican otros medios similares:

 

Seguimos incidiendo, como ya hicimos en nuestro artículo sobre IFCN, en la vergüenza ajena que da leer en vuestra definición que sois una organización “libre de conflicto de intereses” y sin “ánimo de lucro”, cuando está ampliamente demostrado que servís con pleitesía a vuestros amos y que estáis sobrefinanciados por multitud de organismos internacionales para ejercer una censura férrea sobre la información.

Vemos algunos titulares:

Al igual que vuestros compañeros de la televisión y la prensa de España, os alimentan los poderes fácticos de turno, como podemos comprobar siguiendo el rastro de la financiación de los medios de comunicación en España que recibieron un total de 1.742 millones de euros (1.742.000.000 euros) sólo durante la pandemia para que sus marionetas leyeran permanentemente los teletipos emitidos por el gobierno de España.

Canis caninam non est.

 

La realidad del negacionismo en Telegram

A continuación voy a hacer el trabajo que vosotros, los auténticos medios de desinformación, no estáis realizando, un análisis objetivo de la flora y fauna en Telegram.  Como no puedo pararme en los 39 canales “premiados” por Maldita, solo escogeré algunos de muestra para matizar que, lejos de formar un clan, la información contenida en ellos puede llegar a ser diametralmente opuesta. También refutaré algunas afirmaciones vertidas en los artículos que se generaron tras vuestro informe falaz:

Como ejemplo al azar voy a coger este párrafo que publica la Vanguardia, con un titular confuso y tendencioso donde dice que nuestro clan habla de los rusos ( o algo así ); y en cuyo cuerpo de la noticia encontramos esta referencia sobre un reporte del VAERS que compartió Fernando López Mirones en su canal El Aullido:

 

“Está relacionado con las vacunas. Consiguió más de 150.000 visualizaciones en un mensaje en el que se descontextualizaban unos contenidos relacionados con VAERS (…) En la web de este sistema (VAERS) se especifica que  (…) recogen cualquier problema de salud que se produzca después de que alguien haya recibido la vacuna, sin haberse investigado la causa de ese problema. Esos reportes los envía cualquier persona (no sólo sanitarios), y, a veces, carecen de detalles o contienen errores”

Deconstruyamos esto:

Efectivamente, cualquier persona puede reportar un efecto adverso de la vacuna en el VAERS, después de rellenar un extenso formulario en cuya cumplimentación puede tardar más de 40 minutos.  No obstante, pocas personas son conocedoras de este sistema de notificación (ni siquiera los propios sanitarios), así que probablemente la mayoría de los efectos secundarios de la vacuna no están siendo reportados al VAERS. En cualquier caso, hacer públicos los datos reportados al VAERS no supone ningún bulo, ya que estamos hablando de datos obtenidos a través de un organismo público.

Agreguemos sobre este tema que, las guías actualizadas de COMIRNATY ( GUÍA TÉCNICA VACUNA COVID-19 ARNm, PFIZER-BIONTECH ) a 10 de noviembre de 2021, incluyen los cuadros de miocarditis y/o pericarditis tras la administración de vacunas de ARNm Comirnaty (Pfizer/BioNTech) y Spikevax (Vacuna de Moderna);  y que estas guías oficiales enlazan un documento específico con RECOMENDACIONES PARA EL DIAGNÓSTICO, TRATAMIENTO Y DOCUMENTACIÓN DE CASOS DE MIOCARDITIS/PERICARDITIS ASOCIADOS A VACUNACIÓN FRENTE A COVID-19; Por otro lado, el Síndrome de TROMBOSIS INDUCIDO POR LA VACUNA DE SARS-COV2 (VITT) también cuenta con su propio protocolo de manejo diagnóstico y terapéutico, según las fuentes oficiales aquí enlazadas.

Por otra parte, nuestro sistema de notificación Europeo EMA diferencia claramente las notificaciones realizadas por ciudadanos y personal médico. Sin entrar en detalles, las notificaciones sobre mortalidad de las vacunas COVID-19, fueron detalladamente analizadas por nuestro equipo (también utiizamos librerías Python) y los resultados, así como el proceso metodológico detallado, pueden encontrarlo en nuestro artículo web Mortalidad general e infantil de las vacunas COVID según los reportes de la EMA (Eudravigilance) a 26/12/2021.

 

Toda esta información aquí documentada, es reiteradamente ignorada y manipulada por vuestras agencias y medios afines, catalogándola como “negacionista” sin proporcionar el mínimo análisis objetivo de los hechos.

Sin afirmar que el El Aullido, sea el medio más confiable de la disidencia (entramos en desacuerdo con López Mirones a raíz de su participación el el documental ‘The Big Reset’, donde efectivamente ser vertían numerosas mentiras y desinformaciones), concretamente, la denuncia de los efectos secundarios y sobremortalidad ocasionada por las vacunas es una afirmación con indicios sobrados para ser considerada verdadera.

 

Los desinformadores de la disidencia

Fuera de vuestro absurdo etiquetado “negacionista”, sería conveniente separar el trigo de la paja, para poder reconocer a los verdaderos desinformadores de la disidencia, aquellos a los que queréis aglutinar en el mismo saco junto a los profesionales de la información que deseamos aportar hechos documentados y veraces.

Volvamos al estudio de partida que dio lugar a la infamia: “Metodología: cómo investigamos a los negacionistas de Telegram” del que surge  este otro artículo: “El clan del Negacionismo en Telegram“,  un pastiche delirante en el que encontramos mezclados y revueltos, como si fueran la misma cosa, canales como la Quinta Columna (los magufos del grafeno) o el histórico Rafapal, (y sus ensoñaciones con Qanon) junto a otros canales como el de Alvise Pérez o el de Liu Sivaya, posiblemente la fuente más fiable para conocer la realidad del conflicto Rusia-Ucrania:

 

Formando clanes en la disidencia

Si deseabais formar “Clanes” la tarea era bien sencilla, tan sólo debíais usar alguna de estas palabras clave: “GRAFENO”, “MAGNETISMO”, “LUCIFERASA”,  también tenemos “Expediente Royuela” o “Pleyadianos”, tenemos de todos los colores. Todas estas keywords os hubieran ayudado a diferenciar a los auténticos clanes – aunque muy diferentes entre sí-  dentro de la disidencia.

Por ejemplo, tan sólo agregando la palabra “grafeno” obtenéis un target muy concreto de la desinformación en Telegram: LA QUINTA COLUMNA, Plandemia mundial 2021, Canal 5TV , El Diestro. Opinión en libertad, La Quinta Columna International,  Espíritu Templario, COVID-1984, Consciencia Mundial, Hijos de las Estrellas, ADORACIÓN Y LIBERACIÓN,  etc.

Estos sí pertenecerían a un determinado CLAN. Se trata de los canales del “GRAFENO”, aquellos que mezclan verdades, y lucha, con teorías delirantes sin el más mínimo rigor científico.  Básicamente esta audiencia funciona igual que la vuestra (…) Se trata de personas confundidas dispuestas a creerse cualquier cosa, eso sí, dentro de sus sesgos de confirmación. 

Pero, más que Maldita o Newtral, han sido los grupos ReVelión en la Granja y Periodistas por la Verdad, los únicos que han llegado hasta el fondo de este asunto revelando la auténtica mafia que existe detrás de la estúpida teoría del GRAFENO; y del mismo modo hemos ido localizando muchos otros fakes dentro de la disidencia. En nuestra web pueden ver multitud de artículos relacionados que desmontan todos estos circos.